lunes, 29 de diciembre de 2008

un toque de serenidad

Haz lo opuesto
No se trata de llevar la contra a nadie, sino de complementar tu día ying con una dosis de yang (o al revés). Por ejemplo: Si estás todo el día encerrado, sal un rato al aire libre. Si trabajas en un lugar donde hay mucha gente busca unos minutos de soledad. Si permaneces mucho tiempo sentado lavántate y camina unos minutos.

"El cambio siempre llega con regalos bajo el brazo."
PRICE PRITCHETT

Relativiza tu vida
Buena parte del estrés que padecemos se debe a la tremenda importancia que otorgamos a lo que nos sucede, como si no hubiese otros problemas en este mundo. Piensa en las personas que padecen más que tú y la situación adquirirá una nueva perspectiva.

"No envidiemos a los que están situados por encima de nosotros; las cosas que parecían más excelsas se derrumbaron."
SENECA

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola! La verdad es que siempre hay que buscar el equilibrio para conseguir la serenidad, lo que dices del ying y el yang es bien cierto, y puede ser una manera de dar la importancia justa a cada cosa o a cada tema. Las obsesiones nunca son buenas. En fin, un saludo y feliz año 2009!

Anónimo dijo...

Hola a todos y en especial a tí, Fernando:

Desearte lo mejor para este año que acaba de empezar, dándote todo mi ánimo para que continúes escribiendo en tu blog, aunque intuyo que te sentirás bastante sólo a tenor de lo poco/nada que los lectores contestamos y opinamos a tus post's.

En fin, sea como fuere, en mi lista de propósitos para el 2009 está la de participar en este blog.

Hablaremos, con afecto,

kaixo

Anónimo dijo...

Muchas gracias Mónica y Kaixo po compartir en el blog. Es muy grato para mí regresar después de un tiempo y poder leerlos.

Fernando D.